Los argentinos vivimos una nueva jornada histórica porque elegimos presidente y estrenamos el sistema de balotaje a nivel nacional, desde que fue implantado a nivel constitucional en 1994. En esta segunda vuelta, y por una ajustada diferencia, la fórmula Macri-Michetti a nivel nacional llegó a 51,40% (12.903.301 de votos) y Scioli-Zanini 48,60% (12.198.441 de votos). Mauricio Macri resultó ser el nuevo presidente electo.
En la Comuna 11 (Villa Gral. Mitre, Villa del Parque, Villa Santa Rita y Villa Devoto), al igual que en la ciudad en su conjunto la alianza CAMBIEMOS obtuvo una abultada preferencia (66,02%) en relación al FPV que sumó 33,98%.
La Comuna 15 (La Paternal, Chacarita, Villa Crespo, Villa Ortúzar, Agronomía y Parque Chas) fue una de las Comunas que Scioli-Zanini obtuvo menos diferencia con la formula Macri-Michetti; Cambiemos obtuvo un 60,47%, mientras que el FPV sacó 39,53%.
Los guarismos que se registraron en la ciudad tomada en conjunto, la fórmula Macri-Michetti llegó a 64,78% y Scioli-Zanini 35,22% de votos. Un 2,15% de los porteños votó en blanco.
Mauricio Macri ganó en todas las comunas. En donde alcanzó la mayor diferencia fue en la Comuna 2 (Recoleta) 79,54%; en la Comuna 13 (Nuñez - Belgrano y Colegiales) 75,95% y en la Comuna 14 (Palermo) 74,75%. El menor porcentaje lo obtuvo en la Comuna 4 (La Boca-Barracas-Parque Patricios y Nueva Pompeya) con el 55,15% y en la Comuna 8 (Villa Soldati, Villa Riachuelo y Villa Lugano) 51,10%.
Como argentinos no podemos menos que celebrar una vez más vivir en una República libre, con pleno ejercicio de nuestros derechos civiles, que nos permitió elegir una vez más a quienes serán los conductores de nuestro país por los próximos 4 años.
Tenemos la seguridad que sólo un pueblo que tenga la sabiduría de aportar y trabajar, aún desde el disenso, buscando consensos, podrá arribar a acuerdos perdurables para implementar políticas de largo plazo, sabiendo que la templanza y la paciencia es el mejor camino para el diálogo constructivo que nos permitirá mantenernos unidos para soportar con fortaleza los momentos adversos, con la convicción que transitamos en el camino del desarrollo y el progreso para nosotros y para nuestra posteridad.
Hay que aprovechar para recordar y exigir al nuevo presidente que piense en el pueblo argentino que lo llevó a dicho puesto jerárquico y que cumpla con su función, pero por sobre todo que obre con sapiencia, idoinedad y honradamente.