Es inevitable inhalar profundamente mientras uno ingresa a la Biblioteca Becciú. De pronto los pulmones se abren para darle lugar a un perfume exquisito y único que sólo los libros nos pueden dar. Los nuevos libros y otros con hojas amarillentas, vulnerables y casi intocables se convierten en tesoros con sólo mirarlos. Esto sucede aquí, en la Biblioteca Popular Juan M. Becciú, ubicada en el Pasaje Nicolás Granada 1660 (a una cuadra de la Av. San Martín, entre Seguí y Nicasio Oroño).
La historia nos cuenta que en 1915, precisamente el primero de octubre, un grupo de vecinos con inquietudes sociales y culturales se reunieron por primera vez en un sótano de Nicasio Oroño y decidieron la fundación de la agrupación Artística Glorias a Florencio Sánchez, además de la fundación de una biblioteca. La elección del nombre de Florencio Sánchez estuvo motivada por su celebridad entre las clases proletarias, debido al edificio ubicado en Avenida San Martín y Nicasio Oroño, contenido social de sus obras. Con respecto a la biblioteca se sabe, a través de testimonios orales, que los comienzos de la misma fueron como biblioteca ambulante y que Atilio Barlotti fue uno de sus primeros y más comprometidos propulsores. Luego, en 1923 ante el esfuerzo realizado por los integrantes de la Agrupación, el vecindario comienza a contemplarlos con simpatía y a apoyarlos con forma más decidida. Se cambia el nombre de “Agrupación Artística” por el de “Asociación Cultural”. A causa de los interminables debates que se producen en las reuniones se decide la reducción del número de integrantes de la Comisión Directiva, con lo cual en las reuniones de la misma “se comienza a hablar menos, a hacer más y a pensar mejor”. Es en este año donde está documentada por primera vez la existencia de la biblioteca; cuando la Comisión Protectora de Bibliotecas Populares la declara protegida con el N° 990. En 1927 Juan M. Becciú es elegido presidente de la Asociación y su mandato se extiende por largos años. El compromiso humano asumido por Becciú inspirará posteriormente el nombre de la biblioteca. Tres años después, en las crónicas históricas encontradas entre la propia documentación de la Asociación, se menciona como primer local de la biblioteca, uno ubicado en la calle Paysandú del cual se desconoce la numeración exacta. En 1931 se inauguran las nuevas instalaciones de la biblioteca popular y su salón de lectura, en el local ubicado en la calle Donato Alvarez 1545. Este local cuenta con un salón principal de más de 400 metros cuadrados. Arriba de éste se encuentran las instalaciones de la biblioteca y el bar. En 1937 la biblioteca recibe una subvención por Ley del Congreso Nacional.
En 1940 la Asociación logra la adquisición de un terreno de 1200 metros cuadrados en la Av. Juan B. Justo 3650, para la construcción del edificio propio del cual todavía se conservan los planos oficiales, aunque este nunca llegó a construirse.
En 1942 la biblioteca se muda a San Martín 3121 y cuenta para ese entonces con más de 40.000 volúmenes de las más diversas disciplinas, encontrándose especialmente variedad de textos para estudiantes secundarios y universitarios. Son más de 100 lectores que concurren por día.
En 1953 el Ministerio de Educación de la Nación, a través de la Comisión Protectora de Bibliotecas Populares, declara “popular” a la biblioteca y le otorga los beneficios de la Ley N° 419.
Ya para 1970, la Asociación Cultural Florencio Sánchez, en reconocimiento a la labor de Juan M. Becciú, (presidente durante un extenso periodo de la Asociación) incorpora su nombre al de la Biblioteca Popular. Adquiere la casa en el Pasaje Nicolás Granada 1660 en el barrio de La Paternal, donde establece su sede y se encuentra actualmente.
El 23 de septiembre se celebra el Día de las Bibliotecas Populares. Ese día, en 1870, se promulgó la Ley N.º 419, que establecía la creación de la Comisión Protectora de Bibliotecas Populares (actual CONABIP). La iniciativa, propiciada por Domingo Faustino Sarmiento, promovía el desarrollo de estas instituciones con el fin de difundir el libro y la cultura. Actualmente, en nuestro país, hay más de 2000 bibliotecas populares. Las bibliotecas populares son dirigidas y sostenidas principalmente por sus socios y brindan información, educación, recreación y animación socio-cultural, por medio de una colección bibliográfica y multimedia general y abierta al público. La biblioteca recibe donaciones y subvenciones de la CONABIP.
La Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) es un organismo estatal de la República Argentina, dependiente de la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación Argentina, que apoya y fomenta el desarrollo de bibliotecas populares en todo el territorio del país.
¿Cómo asociarse a la Biblioteca Becciú
Podes escribir al Facebook (Biblioteca Becciú), por mail (bibliotecabecciu@gmail.com), por WhatsApp (15-2472-2724) o acercarte a la Biblioteca (Nicolás Granada 1660 - entre Seguí y Nicasio Oroño) y enviás o llevás:
Fotocopia del DNI.
Fotocopia de un servicio.
Matrícula de $100 por única vez.
Cuota de $200 mensuales.
Ser parte de la Becciú implica que podés:
Sacar hasta tres libros por mes.
Pasar a las salas de lectura para leer o estudiar (cuenta con WiFi)
Ser parte de la cadena de mails donde se aviso de todas las actividades y novedades.
Horarios de atención:
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Jueves de 09:00 a 13:00hs.