En la Ciudad se registró un récord de viajes en bicicleta, aumentaron 114% durante la cuarentena por la pandemia de coronavirus. Desde el Gobierno porteño planean extender la red de ciclovías.
La bicicleta es una buena alternativa de viaje, se realiza al aire libre, asegura el distanciamiento social y es una aliada clave, junto con otros medios de micromovilidad como el monopatín, para los desplazamientos de las personas que se suman a las actividades autorizadas en las distintas fases del Plan Integral y Gradual de Puesta en Marcha de la Ciudad. Se hicieron conteos en distintas calles y avenidas, y se registró, en comparación a los datos del año pasado, un aumento de hasta un 114% de viajes en bici. El conteo incluyó los rodados particulares y las de Ecobici, el sistema de bicicletas públicas porteñas.
Durante la primera etapa de la cuarentena el sistema de bicicletas gratuitas, que brinda el Gobierno porteño, estuvo suspendido por riesgo de contagio, y a mediados de mayo se pudieron volver a utilizar con ciertas restricciones: los viajes máximos pueden ser sólo de 30 minutos, cuando antes eran de una hora los días de semana y dos horas los fines de semana; solo se reabrieron 200 de las 400 estaciones como red complementaria al subte y alternativa a viajes cortos; se reabrieron aquellas estaciones que se encuentran próximas a Centros de Trasbordo a fin de que los usuarios puedan optar por este medio y descomprimir el uso del transporte público.
Desde el Gobierno porteño aseguran que las estaciones y unidades se limpian y desinfectan dos veces por día para disminuir el riesgo de contagio. Desde Ecobici, la empresa que tiene la concesión, también recomiendan a los usuarios lavarse las manos antes y después de anclar la bicicleta y de circular con el tapaboca o el barbijo obligatorio.
Pero durante este tiempo, muchas de las estaciones fueron removidas, no se sabe cuál fue el criterio utilizado. A principios de año, desde el Gobierno de la Ciudad, habían anunciado que removerían 20 estaciones las cuales estaban en su mayoría en la zona sur, pero hubo marcha atrás por el rechazo de los usuarios y representantes de la oposición.
“En la Ciudad siempre promovemos el uso de la bicicleta porque es más sustentable, no contamina y nos ayuda a hacer actividad física. En esta pandemia es un medio de transporte clave para los que tienen que ir a trabajar porque al no tener contacto con otras personas y estar al aire libre reduce muchísimo las posibilidades de contagio. La Ciudad hoy brinda esta alternativa para distancias cortas y este récord nos muestra que cada vez más vecinos eligen pedalear evitando el transporte público”, dijo Felipe Miguel jefe de Gabinete de la Ciudad.
Mientras que en 2009 sólo 0.4% de los viajes de la Ciudad se hacían en bicicleta; antes de la pandemia ese porcentaje ya había ascendido al 4% (alrededor de 300 mil viajes). Hoy, en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio, son miles de personas las que eligen moverse en bicicleta; liberando un asiento en el transporte público para los trabajadores esenciales que tienen que hacer viajes más largos o el espacio de un auto que comprime el flujo vehicular. Teniendo en cuenta que en la Ciudad de Buenos Aires la mitad de los desplazamientos son de hasta 5 km de distancia, optar por formas de viaje como la bicicleta es clave para garantizar una movilidad equilibrada, saludable, inclusiva y sostenible.
“Una persona que elige la bicicleta está viajando en un medio al aire libre que garantiza el distanciamiento social y mejora la calidad de su día. Que cada vez más ciclistas se sumen a las calles no sólo es positivo desde el punto de vista sanitario, sino que va a determinar las bases para la Ciudad que queremos darles a las próximas generaciones”, agregó Juan José Méndez, secretario de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad.
El pasado martes 4 de agosto Ecobici alcanzó su récord con 7.838 viajes desde su reapertura durante el aislamiento; mientras que aumentó el promedio de viajes diarios a 5 mil por día. El sistema no se reabrió con fines recreativos sino como complemento del sistema de transporte para hacer viajes cortos. De esta manera, se propone que los medios de movilidad como el subte, el tren o el colectivo sean utilizados por quienes tienen que realizar distancias más largas.
El sistema sigue siendo gratuito, pero desde el lunes 1º de junio se implementó una nueva herramienta para garantizar la rotación de bicicletas y asegurar que todos los vecinos que las necesiten puedan usarlas: se trata de una penalidad por exceso de uso: 40 minutos de viaje (10 minutos de exceso): $10 pesos; 45 minutos de viaje (15 minutos de exceso): $15 pesos/ $25 pesos en total; 50 minutos de viaje (20 minutos de exceso): $20 pesos/ $45 pesos en total; 55 minutos de viaje (25 minutos de exceso): $25 pesos/ $70 pesos en total; 60 minutos de viaje (30 minutos de exceso): $30 pesos/ $100 pesos en total; superados los 60 minutos de viaje: $30 pesos cada 5 minutos de exceso adicional.
Pasados siete días se cobran los $60 mil pesos (es el valor del exceso de uso acumulado). El usuario es contactado hasta tanto se cumpla ese plazo, para darle tiempo de notificar robo y presentar denuncia.
Muchos usuarios del sistema Ecobici se quejan de que tienen que caminar más que antes de la cuarentena para encontrar una bicicleta. Otros apuntaron a la falta de implementación de ciclovías provisorias para mejorar el uso de este medio.
Leonardo Spinetto, responsable de la ONG Bicivilizados, dijo que "el sistema no está funcionando bien. Mientras ponen como foco de contagio a los medios de transporte dejaron pocas bicis y levantaron la mitad de las estaciones, y eso se nota especialmente en la zona periférica de la Ciudad. Cuando tendrían que haber hecho en estos cinco meses ciclovías provisorias, como se ha hecho en Colombia, Perú, Chile, y en varios países europeos, para incentivar este medio en el contexto de pandemia", detalló.
Desde el Ministerio de Transporte dijeron que el esquema para este contexto sanitario contempla 200 estaciones y 1100 rodados "porque la premisa es que tiene que servir para traslados cortos laborales. Cuantas más estaciones se activan más recreativo se vuelve el sistema. Por eso también se modificó el tiempo de uso y se lo redujo a 30 minutos, y se puso multas para quienes excedan el tiempo", añadieron.
En cuanto a las estaciones levantadas, explicaron que "como muchas dejaron de operar, se generaba confusión. Los usuarios las dejaban ahí y quedaban fuera del sistema hasta ser reubicadas. Y este sistema lo que tiene de bueno es que es muy fácil poner y sacar terminales. Las anteriores, las amarillas, requerían una obra. En este caso, un camión con grúa las puede poner, sacar o relocalizar con facilidad, y en la medida que sean necesarias se volverán a instalar".
La Red de Ciclovías y Bicisendas Protegidas está en todas las Comunas y en 41 de los 48 barrios porteños, cuentan con esta infraestructura diseñada para brindarle seguridad vial a los cientos de ciclistas que se mueven por Buenos Aires todos los días. El diseño de la Red privilegia la conectividad hacia el área central y los Centros de Trasbordo, como así también aquellos puntos que concentran un alto número de puestos laborales y de estudiantes.
El Gobierno porteño planea armar una red de ciclovías provisorias, que complementarán a las ya existentes. Sin embargo, desde la Secretaría de Transporte de la Ciudad aún no informaron cómo será o de qué manera se articulará con las demás.
Hay un boom de ventas de bicicletas y largas filas en las bicicleterías de todos los barrios. Se prevé que el mercado de bicicletas será uno de los primeros en reactivarse. “La explosión de demanda de bicicletas ya es una realidad. Las fábricas que están autorizadas a operar con restricciones de personal por la pandemia, están con producción plena”, aseguró el director ejecutivo de la Cámara Industrial de la Motocicleta, Bicicleta, Rodados y Afines (Cimbra), Daniel Tigani.
“La pandemia es una de las razones para estimar que habrá una demanda sostenida de movilidad individual, tanto de la moto como de la bici. Hay 20 fábricas de bicicleta en Argentina y los modelos populares tienen un grado de integración nacional casi de 80%”, explica Tigani.
“Ahora viene el mejor semestre del año, que siempre es el segundo para nosotros. Arranca fuerte la venta en el día del niño y luego se sostiene hasta febrero y empieza a disminuir cuando empiezan las clases y se cae un poquito hasta mitad de año. Vemos una demanda no por una cuestión de estacionalidad sino de preservación de la salud, que mucha gente que no se animaba a usar la bici ahora está cambiando de parecer. Se están moviendo los talleres para reparar bicis viejas y las ventas están muy sostenidas, también las de motos”, cuenta Tigani.
El Ministerio de Transporte de la Nación está pensando en un plan de financiamiento para la compra de motos, bicicletas a motor, bicicletas y monopatines eléctricos para descomprimir el transporte público ya que la mayor parte de los viajes son entre tres y seis kilómetros.
“Cuando se disponga del plan de financiación que anunció el Gobierno, de 36 cuotas con 16% de interés, habrá todavía más ventas en bicis y motos. El plan es a nivel industria, no es para financiar comercios, sino para financiar la venta que se hace a través de ese sistema de financiación”, continúa Tigani.
En tanto el ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, expresó que "Queremos incentivar la micromovilidad en el AMBA y en las grandes ciudades, particularmente en bicicleta. Queremos estimular ese modo de transporte en las principales ciudades para reducir el uso del transporte público. La bicicleta como política de Estado”.