En la campaña de 2019, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta prometió que -de ser reelecto- avanzaría con el proyecto de un nuevo espacio verde en el terreno baldío de Cucha Cucha 2450, en el barrio de La Paternal. Ya pasó más de un año y medio y en el lugar sólo hay un cartel que anuncia la construcción de la plaza. Ante un pedido de informe presentado desde el colectivo político DosMilTres, el Gobierno de la Ciudad respondió oficialmente que “no es prioritaria la intervención en ese espacio”.
La pandemia agudizó la necesidad de contar con plazas y parques y evidenció la falta de este tipo de espacios en ciertos barrios. La Paternal tiene una población de 19.700 personas y sólo 4 mts2 de espacios verdes públicos por habitante. Este índice es inferior al promedio de toda la ciudad que es de alrededor de 6 mts2; y ni hablar de los 15 mts2 recomendados por la Organización Mundial de la Salud.
De hecho, el propio Gobierno de la Ciudad destacaba en 2019 en un estudio urbanístico del proyecto Espacio Verde que “en el barrio de La Paternal se observan pocos espacios verdes”.
La Paternal cuenta con el Parque La Isla de casi 8 hectáreas, pero que se ven amenazadas porque a la brevedad la desarrolladora inmobiliaria Sadia construirá 11 torres de 17 pisos cada una.
La OMS también recomienda que la distancia caminable hasta un espacio verde no supere los 10 minutos. Un hecho que, evidentemente, en La Paternal no sucede. Por ejemplo, si tomamos el centro geográfico del barrio que es Trelles y Cucha Cucha hay que caminar al menos 18 minutos hasta el Parque La Isla, según Google Maps. Estas distancias hacen que las familias tiendan a no ir.
El propio oficialismo porteño sancionó en la Legislatura el nuevo Código Urbanístico de la Ciudad, en el cual el Poder Ejecutivo se compromete a “promover espacios verdes de proximidad en los cuales el recorrido peatonal no debe ser mayor a 5 minutos o 400 metros”. Es decir, contradicen sus propias leyes.
En el terreno de Cucha Cucha 2450 funcionaba, hace muchos años, un mercado de abastecimiento municipal. El mismo cerró y el predio estuvo desocupado por un largo tiempo. En 1998 el Gobierno porteño de Fernando de la Rúa prometió que ahí se iban a construir un centro cultural y una plaza.
En 2001, integrantes de la Asamblea de Juan B. Justo y San Martín ocuparon el terreno, hasta que fueron desalojados en octubre de 2005. La entonces Subsecretaría de Gestión de la Acción Social, a través de la Dirección General de Tercera Edad, proyectaba edificar ahí un hogar de día para adultos mayores. Nada de esto ocurrió.