La Mesa de Gestión Comunitaria del Centro de Salud y Atención Comunitaria (CeSAC) N°22 y del Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Referencia (CEMAR) N°1, junto a sus trabajadoras y trabajadores colocaron dos baldosas por la memoria en homenaje a las víctimas del terrorismo de Estado de la última dictadura cívico militar y a los ex combatientes de Malvinas, en la vereda del centro de salud, ubicado en Fragata Sarmiento al 2152, en el barrio de La Paternal.
El acto se desarrolló el lunes 12 de mayo por la tarde, contó con la presencia de integrantes de la Mesa de Gestión Comunitaria del Centro de Salud y Atención Comunitaria (CeSAC) N°22 y del Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Referencia (CEMAR) N°1, del director de la institución Federico Pettinicchio, referentes de organizaciones como la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, el colectivo Barrios x Memoria y Justicia de Villa Crespo y Chacarita, el grupo de teatro Memoriosos de Colegiales, la agrupación Tierra, Techo y Trabajo, trabajadoras y trabajadores de ambas instituciones sanitarias, y vecinas y vecinos. Las baldosas quedaron instaladas en la vereda.
En una de las baldosas se puede leer: “En homenaje a los ex combatientes de Malvinas. Las Malvinas son y serán argentinas”; mientras que la otra dice: “En homenaje a las víctimas del terrorismo de Estado de la dictadura cívico-militar de 1976. Nunca Más”. La iniciativa surgió de la Mesa de Gestión y fue llevada adelante por el colectivo Barrios x Memoria y Justicia de Villa Crespo y Chacarita.
Federico Pettinicchio, director del CeSAC 22, explicó muy conmovido que “la idea surgió de la Mesa de Gestión, que es un espacio participativo que tenemos con los vecinos del barrio en la que tratamos todos los temas inherentes a la vida del centro de salud con la idea de mejorar el servicio que prestamos”. “En marzo se nos ocurrió hacer un acto que se contraponga a la violencia dado el contexto en el que vivimos en la actualidad en el que, justamente, la violencia parece ser el medio de vida”.
“En este barrio hay varios vecinos que fueron combatientes de Malvinas, muchos quedaron allí, y seguramente hubo muchos desaparecidos, por lo que quisimos dejar un hito que perdure en su homenaje”, continuó Pettinicchio.
“Ante la idea actual que nos quiere imponer el Estado que hay que olvidar, nosotros no nos olvidamos. Este Gobierno nos pone en un marco de una ridícula batalla cultural en la que el presidente vuelve a refrescar el discurso violento que tenía la dictadura y, por eso, este pequeño gesto de los trabajadores y de vecinos que no creemos que la violencia sea el modo en el que tenemos que convivir, sino que sea en el diálogo” concluyó el director del CeSAC 22.
Luego tomó la palabra Sara Eichenbaum, integrante de la Mesa de Gestión y ex trabajadora del sistema público de salud, que recordó la embestida de la dictadura militar en el área sanitaria, en especial en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y las agresiones sufridas a los profesionales que en muchos casos continúan desaparecidos. En ese marco, pidió “tener muy presente lo que pasó en esa época de oscuridad para que no vuelva a ocurrir nunca más” y agregó “la dictadura eliminó una forma de hacer salud en el Hospital de Niños, tenemos que tener muy presente que esto pasó y nos dejó diezmados”.
A continuación Verónica Cacciari, médica del CEMAR, militante de HIJOS y que está buscando su identidad ya que fue apropiada en 1978, dijo estar “orgullosa de presenciar el homenaje en el lugar en el que elegí trabajar desde hace diez años. Estamos transitando momentos de muchísima crueldad donde los derechos se empiezan a perder y nos empiezan a recordar esas épocas tan tristes y tan oscuras de nuestra historia y de nuestra sociedad”, expresó la profesional y cerró diciendo que “la lucha por la verdad, la memoria y la justicia no se va a terminar porque es la lucha que nos pasaron las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo”.
Por último, Zulma Núñez, trabajadora social del CeSAC 22, destacó “este evento de memoria colectiva y comunitaria en estos tiempos. Tenemos memoria de dolores y por eso seguimos reafirmando, a más de 40 años, que nunca más queremos esa época oscura que tuvo la Argentina”.
El cierre del acto contó con la representación de una escena de la obra “La pelusa en el ombligo” del grupo de teatro Memoriosos de Colegiales, formado por vecinas y vecinos, que cuenta sobre la desaparición colectiva de la Villa Dorrego del barrio de Colegiales que fue desalojada de forma violenta por la dictadura militar en 1977. Allí vivían 3.000 familias.