La Asociación Civil Llantén y La Huerta de la Cuadra organizaron actividades para celebrar la llegada del otoño con una recorrida por el barrio con avistaje de aves e identificación de árboles y un taller de compost. Todo esto en el marco del mes del compostaje, el festejo por el Día de la Tierra (22 de abril) y el Día del animal (29 de abril).
Con la llegada de un nuevo ciclo se realizó esta juntada de la que participamos junto a otras vecinas y vecinos, en la que adquirimos nuevos conocimientos sobre la flora y fauna presentes en los barrios de Villa del Parque y La Paternal. Rocío González de Sintonía Naturaleza y autora del libro “Aves de Buenos Aires”, nos ayudó a distinguir las palomas picazuro, caranchos, torcazas y ratonas. Nos explicó que el mejor momento del día para observar aves es la mañana o el atardecer. Clivia nos guió en la identificación y características de los árboles como ceibo, tipa, timbó, guarán -guarán, ombú, lapacho y fresnos. También observamos muchos frutales.
OTOÑO
Metáfora de otoño en el andén de la estación. Difusa luz indica que viene, o quizás es el tren de carga llevándose aquel adiós. La vuelta a la manzana tan irregular tiene un sabor especial. Los adoquines decorados con un verdín vintage, las casonas que subsisten me piden que les descuelgue ese cartel de “vende”. Se arremolinan los recuerdos entre las hojas de los paraísos, las bolillitas amarillas y un caudal de heridas que desembocan en estos días. El verde y el cemento compitiendo por la vista al cielo, como esos tres testigos de Jehová vestidos como para que se los lleve el infierno. Abril aferrado a los sueños, mientras se despedaza en su vano intento por cumplir un hoy incierto. Que importan los almanaques en el espíritu de un sentimiento. Dos mates y un trozo de chocolate en la tarde de un domingo que colorea al tiempo. La esperanza tocando el timbre en una casa sin luz. La sombra y el sol enamorándose en el patio de atrás. El viento corriendo a la soledad por las calles. La hilera de árboles exhibiendo la desfachatez de su naturaleza. Una pelota con gajos me busca en la plaza, la mirada de ese nene me hace llorar con ganas. Y ahí, entre la diagonal de siempre, a dos cuadras de lo que viene, el corazón te palpa para guiarte a la esquina en donde todo se puede.
@nacholopezescribe