Por primera vez, el barrio deja de ser el único en la Ciudad sin un espacio verde. La comunidad festejó con una jornada inolvidable y llena de significado.

Este sábado 12 de abril no fue un día más para Villa Santa Rita. Fue un día que marcó un antes y un después, el cierre de una larga espera que se extendió por más de cuatro décadas. El barrio, hasta ahora el único de la Ciudad de Buenos Aires sin una plaza propia, celebró con emoción la inauguración de su primer espacio verde, ubicado en Álvarez Jonte 3222.

La nueva plaza no es solo una obra pública: es el resultado de una lucha vecinal que atravesó generaciones. Desde los años 80, los vecinos soñaban con tener un lugar de encuentro, de juegos, de naturaleza. Ese anhelo, sostenido con asambleas, marchas, cartas y proyectos, se hizo realidad con el impulso colectivo y el compromiso de una comunidad que nunca se resignó.

La jornada inaugural fue una verdadera fiesta. Desde el mediodía, familias enteras se acercaron para participar de las múltiples actividades pensadas para todas las edades: hubo shows infantiles, espectáculos circenses, maquillaje artístico con brillos y pinceles, juegos educativos y propuestas lúdicas para aprender sobre reciclaje y energías limpias. La feria “Río de Libros”, organizada por la biblioteca popular “La Puñalada”, ofreció más de 1.600 títulos para intercambio, celebrando la lectura como motor de comunidad.

El mural que adorna una de las medianeras del predio fue un gran atractivo para los visitantes: una obra colectiva que narra visualmente la identidad del barrio. En el centro, un libro abierto da origen a un árbol, símbolo del conocimiento que echa raíces. A un lado, unas manos adultas entregan una planta a manos pequeñas; al otro, una figura con guardapolvo blanco rodeada de libros y animales. Todo el mural está atravesado por mariposas, flores y colibríes. Arriba, el nombre del barrio, "Villa Santa Rita", destaca con orgullo.

La nueva plaza tiene una superficie total de 1.725 m². Cuenta con más de 800 m² de césped, 360 m² de canteros con vegetación autóctona, y tres sectores bien definidos: un patio de juegos con pisos de caucho, un área de reunión bajo pérgolas y una zona de descanso con bancos. También hay postas aeróbicas, cartelería con normas de uso, y espacios pensados para la convivencia con mascotas.

Durante el evento, el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, recorrió el lugar junto a vecinos y expresó: “Con este nuevo espacio verde, Villa Santa Rita deja de ser el único barrio porteño sin plaza. Estamos cumpliendo con una deuda histórica”.

Por su parte, Ignacio Baistrocchi, ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, destacó: “Esto es mucho más que una plaza. Es una conquista comunitaria que demuestra el poder de la organización y del amor por el barrio. Esta plaza habla de esperanza, de compromiso y de sueños cumplidos”.

La historia detrás de este espacio verde se remonta a los años 80, cuando surgió la idea de expropiar un terreno que pertenecía a una ex fábrica de cigarrillos. Pero fue recién durante la pandemia, con la urgencia de contar con espacios al aire libre, que el reclamo se reavivó con fuerza. En 2023, la Legislatura porteña aprobó la expropiación del predio, la compra se concretó en diciembre, y en julio de 2024 se lanzó la licitación. Las obras comenzaron en noviembre y, en menos de cinco meses, la plaza fue una realidad.

El colectivo “Una plaza para Villa Santa Rita”, impulsor clave de esta historia, fue incansable en su tarea. “Gracias a quienes nunca bajaron los brazos”, se repetía entre los asistentes. Porque si hoy hay una cinta cortada, es gracias a las miles de horas invertidas en imaginar, insistir y construir futuro entre los vecinos.

Villa Santa Rita, por fin, tiene su plaza. Y con ella, un nuevo capítulo de su historia comienza a florecer.