Escribe: Cynthia Mariel Sterlino
VICEDIRECTORA DE NIVEL PRIMARIO GCBA - Apoyo bibliográfico: diseño curricular para la escuela primaria
Ante el inicio de un nuevo ciclo lectivo, es importante recordar las responsabilidades compartidas de familias, alumnos y escuela:
• La escuela bebe ofrecer a los alumnos cierta selección de saberes y practicas relevantes.
• Establecer encuadres institucionales en concordancia con los valores de libertad, tolerancia, igualdad, verdad, justicia, solidaridad, paz.
• Ofrecer oportunidades para que los alumnos se comprometan con su propio aprendizaje y desarrollen una confianza creciente en sus posibilidades.
• Desarrollar acciones tendientes a la continuidad de la experiencia escolar de los alumnos estableciendo criterios de inclusión en los proyectos
• Promover el uso de la biblioteca escolar.
• Generar situaciones para el uso de la tecnología de la información y comunicación.
• Promover el respeto y la valoración de la tarea escolar y el desarrollo de hábitos de estudio y trabajo, etc.
Todos los contenidos y áreas de la escuela, específicamente en primer ciclo, (1º, 2º, 3º grado) se abordan en un proceso formativo de larga duración en cada una de las áreas aunque las expectativas familiares estén centradas en la alfabetización y el aprendizaje de las operaciones aritméticas.
Desde la interacción con otros, se espera que a lo largo de estos tres años, los niños avancen en las diversas formas de cooperación, ligadas al aprendizaje, que se formen como escolares aprendiendo el sistema de roles y normas que marcan las relaciones. Los niños irán aprendiendo a resolver conflictos a través de la adquisición de hábitos y actitudes necesarias para la convivencia.
Estos son años importantes por el sentido fundacional que tienen en lo que refiere al vínculo tripartito escuela-alumnos-familia.
El segundo y tercer ciclo (4º-7º) profundiza el encuentro de los alumnos y la diversa experiencia cultural al abrir nuevas posibilidades procurando mayor dominio de técnicas, procedimientos y recursos. Este ciclo amplia el acceso a distintos campos de conocimiento, se especializan ciertos aprendizajes y aparecen nuevas áreas. Es responsabilidad compartida que cada alumno se sienta capaz de aprender.
Otro aspecto central de estos ciclos es la preparación de los alumnos para la escuela secundaria concentrando los esfuerzos en nuevos logros, desarrollando mayor autonomía y organización gracias al trabajo formativo previo.
Si este ciclo es rico en propuesta pedagógica, es posible asegurar las trayectorias educativas de los alumnos.
Entre 4º y 7º grado se busca instalar en los chicos y en sus familias la idea de que tiempo de aprendizaje no es solo el de la escuela, sino que es necesario un incremento de la tarea extraescolar en complejidad y trabajo autónomo. La asignación de tarea para el hogar supone trabajar con los alumnos sobre la autoorganización y con las familias para que éstas encuentren los modos de que sus hijos dispongan condiciones para el trabajo en casa con las orientaciones precisas.
Las responsabilidades de este vínculo tripartito son indelegables