Se presiente fácilmente su vocación como maestro, y es que una cincuentena de alumnos lo afirma. Da clases de guitarra, bajo y charango. Preside hace años el Centro Cultural Eluney y además de ser Licenciado en Ciencias Políticas, también es Gestor Cultural. Víctor, alias “Pampa” nos cuenta sobre sus inicios en la música y cómo es ser músico en la ciudad porteña. De una sencillez cálida y parsimoniosa, el músico de 32 años se destaca.
¿De dónde viene tu gusto por la cultura?
Mi viejo era Director del conjunto Los Llaneros y ya a mis 12 años empecé a trabajar con él, haciendo algunas tareas como sonido. Desde esa edad que estuve abocado a la música. Fue nacer en una cuna musical. Y eso me sirvió muchísimo para aprender todo lo que es el manejo del escenario, la gente, hacer un poco de manager, etc. Sostener un emprendimiento musical sin tener un manager, hacerlo de manera independiente, se hace muy difícil y cuesta el doble. En todos esos años pude ir aprendiendo, pero lo demás fue como todo: prueba y error.
¿Cómo empezaste en el mercado musical?
Hace muchos años que comencé a dar vueltas con este tema de la música, más o menos arranqué por el año 1998. Básicamente fueron cosas que empecé a hacer por el barrio, lo que fueron mis primeras presentaciones. Y gracias a Dios me está yendo bastante bien, muy bien con Los Pampas y con mi carrera solista, por eso siempre que me convocan de algún evento del barrio trato de estar. Porque creo que está bueno ser agradecido con los que se bancaron las primeras presentaciones que fueron las más difíciles, porque uno no tiene experiencia, porque te ponés muy nervioso o estás “medio verde”. A partir de que la gente nos bancó se pudo ir construyendo una carrera.
¿Te acordás de tus primeras presentaciones en el barrio?
Mis primeras presentaciones en el barrio fueron en un lugar que ya no está más, en Cucha Cucha y Espinosa. En todas las plazas del barrio, en el Centro Cultural La Paternal, en el Centro Cultural Resurgimiento, en Villa Mitre, en eventos organizados por la Asamblea que desde su origen nos ha convocado, en varios colegios, en donde se podía tocar nos llamaban. También han cerrado lugares en los que hemos tocado, me acuerdo de Makena, un Pub en Neuquén y Nazca. Gracias a estos lugares hicimos nuestras primeras apariciones. Por eso siempre que me convocan voy. Nos dieron una gran mano todos los diarios barriales, que siempre difundieron nuestro trabajo y le otorgaron un valor importantísimo.
¿Qué pasó con la agrupación que dirigías, “Los Pampas”?
Actualmente seguimos con Los Pampas pero con otra agrupación nueva, yo sigo estando al frente con la formación que tuvimos desde 2002 hasta 2009, y en ese año cambiamos de formación porque cada uno fue buscando distintos caminos, pero conservamos una gran amistad. Algunos de los chicos cambiaron su rumbo y yo decidí seguir con la música, pero nunca una pelea ni enemistad. A partir de esto formé la nueva banda y me di un tiempo para hacer cosas como solista, y en esa época arranqué también con el Centro Cultural Eluney.
¿Por qué la idea de fundar un Centro Cultural?
Empecé solo en mi casa, estaba con 40 alumnos y todavía vivía en la casa de mis padres, ya tenía que “emigrar”, y evalué entre la posibilidad de alquilar un departamento para mi solo y dar clases ahí, preferí jugármela e ir por un lugar más grande, y apostar con ese dinero que había juntado al desarrollo cultural en el barrio y en la Ciudad de Buenos Aires, que es algo en lo que creo fervientemente. Con Los Pampas trabajamos mucho en fiestas privadas, Centros Culturales, Festivales, etc. Eso me hizo conocer un montón de gente relacionada con el arte, desde otro lado: profesores de danza, de dibujo y pintura, otros instrumentos, y con todo ese conocimiento pudimos armar el Centro Cultural Eluney y desde ahí que sigue funcionando.
¿Qué actividades ofrece Eluney?
Canto, guitarra, bajo, danza, pintura, teclado, entre otras. Y convoca a mucha gente interesada. Yo solo tengo 55 alumnos, ya pusimos otros dos profesores de guitarra, así que tenemos más o menos 80 alumnos en guitarra. Yo doy clases de guitarra, bajo, charango y canto.
¿Cómo recibió la gente tu primer disco?
La salida de mi primer disco como solista fue una experiencia maravillosa con el acompañamiento de dos músicos increíbles. En ese disco hice coros, percusión, guitarra, charango, bajo… Y músicos que iban pasando también incluyeron cosas en el disco, estuvo un tiempo frenado y luego lo volvimos a retomar. Fue un gran disco que registró a muchos músicos amigos que me acompañaron. Además son todos mis temas, algunas canciones que tengo guardadas desde los 15 años aparecen aquí. La gente lo recibió muy bien, este disco salió independiente y se vendieron todos. A fin de año lo presenté en la plaza de Pappo y tuvo una muy buena repercusión.
IDENTIKIT DEL ARTISTA DE BARRIO
Nombre: Víctor Darío Torres
Alias: Víctor “Pampa”
Edad: 32
Profesión: Es Licenciado en Ciencias Políticas y este año terminó un master en Gestión Cultural. Pero es reconocido por su labor musical.
Hincha: 100% de Argentinos Juniors.
Un lugar en el barrio: La Plaza La Pampa (Gaona y Gavilán) y la Plaza de Pappo (Boyacá y Juan B. Justo).
Un lugar para comer en el barrio: Cantina Chichilo (Camarones 1901)
Preside el Centro Cultural Eluney (Boyacá 927)
Tel.: 3966-2143
En facebook: Eluney Centro Cultural y Bibloteca Popular