La Administración de Infraestructura Ferroviaria (ADIF) llamó a licitación para que el 9 de febrero se abran los sobres y se conozca la empresa a la que se adjudicará la finalización de la obra de la estación Villa Crespo del ferrocarril San Martín en un plazo de 240 días corridos.
La estación La Paternal no está incluida en el llamado a licitación porque presenta un estado de avance mayor al de Villa Crespo y es considerada “en obra” por las autoridades.
Los pliegos, publicados el sitio web de la empresa integrante de Ferrocarriles Argentinos, estipulan las diferentes tareas que se deberán llevar adelante para poder habilitar la estación al público luego de dos años y medio de demoras. Entre los trabajos que se deben hacer está la construcción de escaleras, losas de andén, colocación de mobiliario, habilitación de ascensores y la infraestructura general.
En noviembre de 2021, la Ciudad y el Estado nacional anunciaron el traspaso para la finalización de las obras. Nación ya comenzó con algunos trabajos preliminares, más que nada en las condiciones para la seguridad de las estaciones y de las vecinas y vecinos de la zona.
Este convenio abarcó no sólo a las estaciones inconclusas, sino también a otras obras que también quedaron truncas -como la finalización de la vía cuarta del viaducto- y del resto de los trabajos que ya habían sido terminados -como, por ejemplo, el señalamiento-.
El tren pasa por esas dos estaciones (La Paternal y Villa Crespo) de la Comuna 15 pero no para hace más de 4 años. Al comienzo de las obras el Gobierno porteño había contratado colectivos para que los pasajeros puedan hacer el tramo que les faltaba, partía de Villa del Parque y llegaban hasta Palermo, pero tras la inauguración a medias del viaducto, este servicio se dio de baja.
El gobierno de Mauricio Macri, traspasó las obras de los viaductos de los trenes Mitre y San Martín a la Ciudad. La elevación de las vías fue, junto al Paseo del Bajo, una parte central de la campaña electoral de 2019.
Si bien el viaducto fue habilitado al tráfico ferroviario en julio de 2019, la finalización y puesta en funciones de ambas paradas todavía no se concretó. Originalmente, estaba previsto que fuesen inauguradas en agosto de dicho año. Sin embargo, las obras no avanzaron más y quedaron en un completo estado de abandono.
La UTE Green-Rottio, que tenía a cargo la obra, comenzó con problemas financieros a pesar de los pagos puntuales que realizaba el gobierno de Rodríguez Larreta. El concurso preventivo no tardó en llegar dejando una deuda de más de $400 millones (a septiembre 2019), perjudicando a 50 PyMEs que Green-Rottio subcontrataba para la realización de las obras.
El contrato con Green-Rottio fue rescindido en septiembre de 2019 por el Gobierno porteño que convocó a una nueva licitación en diciembre de ese año a la que se presentaron 12 empresas, pero el advenimiento de la pandemia en marzo de 2020 dejó todo en la nada.